En el caso de que sea la primera vez que planifica una reunión inclusiva o grupo focal de discusión, consulte con las mujeres y hombres con diferentes tipos de discapacidad y de edades diferentes (incluyendo niños y niñas y personas mayores). Esta es la manera más efectiva de asegurarse de que no se ha pasado nada por alto.
Para asegurar que un lugar de reuniones es accesible:
Es fácil trasladarse al lugar y hay transporte para aquellas personas que no pueden caminar largas distancias.
La entrada no tiene escalones. Si no es así, coloque una rampa.
Hay buena iluminación para las personas con dificultades de vista.
Hay sillas disponibles para las personas a las que les resulta difícil sentarse en el suelo.
Piense en la cadena de movimiento de diferentes personas, desde sus casas al lugar de reuniones, desde la entrada a la sala de reuniones, al baño y al comedor.
Recuerde:
Las comunicaciones acerca de la reunión deberían llegar a todas las personas, incluidas las personas sordas o ciegas.
Algunas personas con discapacidad y personas mayores van acompañadas por asistentes personales o cuidadores, cuente con ello antes de la reunión.
A menudo, las mujeres y las niñas con discapacidad tienen poca representación y las organizaciones deberían promover enérgicamente su participación.