Difusión de alertas
La mejor manera de garantizar que los mensajes de alerta temprana llegan a tiempo a todas las personas es la utilización de una combinación de diferentes mecanismos auditivos y visuales.
Hay que consultar con las organizaciones representativas de los diferentes grupos de riesgo de la comunidad y analizar junto a ellas las barreras que presenta el sistema de difusión de alarma temprana existente.
Para hacer más accesible la difusión de alarma temprana:
- Emplear señales de audio como timbres, alarmas, sirenas, tambores, radio/televisión o mensajes por altavoces para alcanzar a las personas ciegas o con poca visión.
- Ofrecer alertas tempranas visuales, con banderas o destellos de luz junto a alarmas y sirenas y mensajes de texto en la televisión, o mediante teléfono móvil para llegar a las personas sordas o con dificultad de oído. Combinar textos con imágenes, gestos y el lenguaje corporal cuando sea necesario.
- Combinar la información oral con imágenes y lenguaje de signos (u otras formas de gestos o lenguaje corporal, ya que no todas las personas sordas saben lenguaje de signos). Cuando sea posible identificar la forma de comunicación que prefieren las personas sordas o con dificultad de oído.
- Presentar materiales impresos (posters, folletos) con mensajes cortos en formatos fáciles de leer y braille.
- Utilizar ilustraciones que incluyan mujeres y hombres, de diferentes edades y con distintas discapacidades. Mostrar personas con discapacidad de manera positiva y digna.
- Asegurarse de que los sistemas de alerta temprana están disponibles y funcionan en los hospitales e instituciones residenciales donde residan personas con discapacidad, niños, niñas y personas mayores (por ejemplo: residencias, orfanatos, hospitales psiquiátricos, casas para personas con discapacidad).