Las manijas específicas permiten que las mujeres y hombres con discapacidad, puedan abrir, agarrar, levantar o empujar con facilidad las puertas o ventanas. Además, los niños y las personas mayores también se beneficiarán de ello.
Hay que elegir manijas que sean fáciles de agarrar. Deben evitarse, los pomos o manijas cilíndricas que son difíciles de agarrar y girar.
Las manijas de las puertas deben colocarse entre los 80-90 cm de altura para que los usuarios de sillas de ruedas, niños y niñas o personas con enanismo puedan utilizarlas con facilidad. En las puertas correderas, un tirador excelente es el que tiene forma de “D”, como se muestra en el dibujo inferior junto con otras manijas de agarre fácil.